¡Jugamos con el agua!
Los juegos de agua aportan muchos beneficios y son una solución ideal para combatir el calor veraniego a la vez que nos permiten divertirnos y compartir buenos ratos juntos.
El verano es el mejor momento para hacer actividades con agua con los más pequeños de la casa. Pero combatir las altas temperaturas y la diversión no son los únicos beneficios que aporta jugar de ella, sino que también es una gran herramienta para mejorar su desarrollo en diversas áreas del aprendizaje.
Matemáticas básicas
El agua, al ser un líquido fácil de manipular, ayuda a que los niños y las niñas empiecen a comprender conceptos básicos como más y menos o vacío y lleno. En la piscina, puedes dar a tu hijo o hija tazas o cubos de plástico de varias medidas para que se vayan familiarizando con los tamaños. Además, puedes animarles a que pasen agua de un recipiente a otro para entrenar su coordinación ojo-mano.
Habilidades motoras finas
Aprender a mover los dedos de la mano para coger objetos es uno de los primeros retos que deben superar los niños. Como madre y padre puedes ayudarle a perfeccionar esta capacidad, dejando que jueguen con globos de agua, esponjas o cubos blandos.
Desarrollo del tacto
Con el agua se puede jugar con diferentes temperaturas y texturas (líquida y hielo). Además, también puedes añadir arroz, arena o algas y así hacer que puedan experimentar con diferentes sensaciones a través del tacto.
Física básica
A medida que tu hijo o hija va descubriendo el mundo, se da cuenta que a su alrededor hay objetos grandes, pequeños, pesados o ligeros. Pero sólo el agua le permitirá aprender que las cosas flotan o se hunden en función del material del que estén hechas.
Habilidades motoras
Chapotear, esquivar el chorro de un aspersor, saltar desde la orilla de la piscina, deslizarse por un tobogán… Estas actividades, además de fortalecer los miembros, ayudan a que tu hijo o hija aprenda a sincronizar sus piernas y sus brazos.
Desarrollo emocional y social
El agua ayuda a aliviar tensiones, ya que permite a los niños y las niñas liberar emociones salpicando, deslizándose o chapoteando. Además, una carrera de cubos de agua, jugar al escondite en la piscina o jugar a pasarse globos de agua son actividades que permiten a los niños aprender a jugar de forma cooperativa.
Creatividad
Los sitios con agua ofrecen un contexto diferente al de casa o el parque, lo que les aporta la posibilidad de crear juegos de imitación no habituales. Como por ejemplo jugar a ser peces, ranas en un estanque, sirenas, piratas o, incluso, ejercer profesiones como bombero con una manguera, veterinario de animales del mar, marinero…
En conclusión, los juegos de agua aportan muchos beneficios y son una solución ideal para combatir el calor veraniego vez que nos permiten divertirnos y compartir buenos ratos juntos, forjando y fortaleciendo relaciones familiares y entre amigos. Así, los juegos de agua:
- Sirven para combatir el calor.
- Son una forma para que los niños hagan ejercicio a la vez que se divierten.
- Todos estos juguetes son para jugar en compañía, así que fomentan las relaciones grupales con amigos o la familia.
- Incitan a desarrollar la imaginación del niño o la niña.
- Son una forma de distraer a nuestros hijos e hijas durante los meses de verano, una alternativa a las tabletas y los videojuegos.
- Muchos de ellos son muy económicos.
- Se pueden usar en cualquier lugar. A veces no es necesario que sea en la playa, sino que se pueden jugar en un parque o en la terraza de casa.
- Y por supuesto, son una forma divertida de pasar más tiempo con nuestros hijos e hijas.
