Manualidades navideñas para la escuela con Cléopâtre
Se acerca la Navidad, la fiesta más emocionante del año, y desde Abacus queremos ayudarte a compartir con tus alumnos y alumnas las propuestas más originales para impregnaros del espíritu navideño. Poned a prueba vuestra imaginación con estas dos manualidades que os proponemos de la mano de Cléopâtre, expertos en pegamentos y pinturas para el mundo escolar desde 1930.
Bolas de Navidad
No hay Navidad sin árbol y no hay árbol sin bolas de Navidad. Pero, ¿sabías que lo que hoy son bolas de plástico de mil colores, en la antigüedad eran de algodón? ¿Y que lo que hoy es una guirnalda, en aquellas fechas eran objetos decorativos dirigidos a asegurar el ciclo de las estaciones?
Y es que, con el fin de asegurarse los regalos que la tierra les da a lo largo de los días largos y prósperos, en el tiempo de la cosecha y de la recolección, los romanos, de manera simbólica, le devolvían a la tierra lo que ésta les había dado. ¿Cómo? Pues poniendo bolas de algodón o de lana y figuras de estrellas en los elementos vegetales que los ciudadanos tienen en su casa. Una manera de decir que, después de los días oscuros y más cortos del año como son los invernales, llegarán los más luminosos, en los que la luz da vida a la naturaleza, en referencia a la primavera y el verano.
Materiales: Barra de cola Cletoo – Pincel Plano Abacus – Pistola de silicona – Bola Porex Abacus 6 cm – Spray permanente Cléopâtre – Purpurina plata
Paso a paso
Paso 1.
Recortar los tejidos en tiras de 2 centímetros de ancho. Aplicar Cleotoo a la bola de cartón y al tejido. Cortar el excedente de tejido.
Paso 2.
Aplicar de nuevo la cola y aplicar las tiras de tejido una al lado de la otra.
Paso 3.
Aplicar el barniz al tejido una vez secado. Espolvorear purpurina, que se pegarán al contacto con el barniz. Dejar secar.
Paso 4.
Terminar de decorar las bolas todo pegando con la pistola de silicona líquida tiras de lana y ramas de árboles, como el abeto.
Mini trineos
El origen del trineo es muy antiguo y probablemente deriva del tobogán de los amerindios, que no conocían la rueda y se desplazaban utilizando este tipo de transporte. La tracción animal la hacían mayoritariamente los caballos, renos y perros (de razas especiales como el husky, malamute o samoyedo). Incluso en el Antiguo Egipto se usaron de madera para transportar diversos materiales sobre las cálidas arenas. Pero si hablamos de trineos no podemos evitar hablar de la Navidad, de Papá Noel y de su trineo tirado por renos voladores, unos “adornos” que se incorporaron a la figura de Santa Claus hacia 1820.
Materiales: Pistola de silicona – Palos de polo naturales Abacus – Témpera negra – Témpera roja – Témpera blanca – Cascabeles Abacus plateados – Pompones brillantes Abacus – Cordel algodón rojo
Paso a paso
Paso 1.
Coger 6 palos de polo y cortar un séptimo por la mitad. Pinta dos palos de polo de negro y el resto, de color rojo o blanco.
Paso 2.
Para hacer el asiento del trineo, unimos 4 palos de polo rojos (o blancos) y los fijamos por la parte inferior con los palos cortados de forma perpendicular. Una vez lo tengamos, lo pegamos a los palos negros, que irán de lado y paralelos entre ellos.
Paso 3.
Decoramos el trineo con cascabeles, cordel y pompones. Los pegamos con la pistola de silicona líquida.
Paso 4.
¡Y ya tenemos nuestro trineo hecho!
Sobre Cléopâtre…
Los orígenes de las colas Cléopâtre se remontan al año 1930, en el número 4 de la calle Chapon de París, cuando el señor Chamson decide iniciarse en esta aventura en un momento en que las colas eran todo un lujo. Casi 100 años después, Cléopâtre continúa siendo líder en el mundo escolar. Todo el mundo recuerda sus tapones naranja gracias a la apuesta convencida de la empresa para la pega como recurso indispensable para la expresión creativa de los niños, ya que con ella pueden crear pequeños objetos y manualidades con los que reflejar su personalidad.
Además, Cléopâtre ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos y el respeto medioambiental es una de sus premisas fundamentales. Así, sus productos sólo utilizan fórmulas a base de materias renovables y envases reciclables. Del mismo modo, apuestan por la reducción del impacto del transporte a la vez que ponen en valor los residuos en un camino hacia el “zero waste”. Y todo, obviamente, gracias a la colaboración y sensibilización de sus clientes y consumidores.
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